Sabemos que la violencia de género es aquella que, con diversas formas, tiene como
principales víctimas a las mujeres de todas las edades. Y existe consenso en que la
prioridad de las acciones preventivo-asistenciales contra dicha violencia debe estar
dirigida hacia la protección, la dignificación, el empoderamiento y el logro de
autonomía de las mujeres para que puedan vivir en paz, justicia e igualdad.
Esta respuesta a la violencia, en su aplicación, está cosechando poco a poco en el
mundo importantes logros que todas conocemos. Sin embargo, estas acciones pueden
generar, sin percibirlo, un efecto secundario indeseado y contrario a sus objetivos. Este
efecto consiste en que, al centrarse “en” las mujeres, puede estar confirmando para
algunos sectores la idea de que el problema de la violencia es “de” las mujeres.
Y esto -que lo creen la mayoría de los varones y no pocas mujeres- es un obstáculo para
la acción que debe ser removido, ya que la violencia no es un problema “de” sino un
problema “para” las mujeres, siendo en realidad, y fundamentalmente, un problema
“de” la cultura masculina/patriarcal y “de” los varones. Son las normas de esta
cultura las que la propician y toleran la violencia, y son generalmente ellos quienes la
ejercen de diversos modos y en diferentes ámbitos.
Y no sólo el problema no es "de " las mujeres sino que tampoco es un problema
"familiar o doméstico", aunque repercuta en estos ámbitos. Estas definiciones, 2
homologa doras de todos los miembros de una familia, invisibilizan que algunos
integrantes de la familia son casi siempre las víctimas (mujeres y niñas), y otros(los
varones adultos o adolescentes) los agresores (cerca del 95% de las personas que
ejercen violencia doméstica son varones, ejerciéndola sobre sus compañeras, hijas
propias o de sus compañeras, madres o hermanas)
Por todo esto, es importante en cualquier estrategia de prevención de la violencia, no
sólo ocuparse de la víctima, sin además señalar sin temor a los varones como los
principales ejecutores de la violencia, y hablar de violencia "masculina" contra las
mujeres.
OPINION
partiendo de la idea que es necesario visibilizar el hecho que la violencia
contra las mujeres es fundamentalmente ejercida por varones, se enuncian una serie de
actuaciones que es necesario desarrollar para modificar la incidencia de esta violencia
masculina. Se pone el acento en las actuaciones que pueden realizarse en los ámbitos
educativo y sanitario, las que deben realizarse articuladas a las ejecutadas en otros
ámbitos, y no quedar limitadas a la rehabilitación de los varones que ejercen violencia
física, sexual o psicológica graves.
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ResponderEliminarLa violencia sexual uno de los temas de mayor transcendencia en el siglo XXI, muchas de las veces hemos censurado está palabra por miedo, por vergüenza, por amenazas,etc.
ResponderEliminarHace años atrás muchos de los derechos se han vulnerado, hoy en día queremos cambiar esta mentalidad, ya que han ocurrido varios casos de violencia sexual y de género, pero no se ha logrado hacer nada al respecto, mucho menos si tal ocurria dentro del hogar, se decía pues que esto afectaba la armonía familiar.
Una de las grandes causas de violencia es el conocido "MACHISMO", un término que va más allá, desde décadas atrás este se ha realizando, donde los hombres han creído que por ser hombres son superiores a las mujeres, que por más mujeres que tenga pues más MACHOS son.
El machismo es un conjunto de creencias, costumbres y actitudes que sostienen que el hombre es superior a la mujer en inteligencia, fuerza y capacidad, quienes creen en el machismo se deduce que se han educado en él, se considera que solamente el hombre tiene dominio ante las cosas de la vida, como eleccion y desición. Muchas de las veces la mujer ha sido considerada como objeto sexual para satisfacer al hombre sus necesidades; como esclava que permanezca solo en casa o cuide de sus hijos, porque el momento de criarlos se vuelven solamente suyo, esto no debe ser así, hombre y mujer tenemos los mismos derechos en crianza, educación, manutención, vestimenta de los hijos, fueron procreados por los dos.
Hoy en día se busca una equidad de género, donde hombre y mujeres difrutemos de los mismo derechos, donde no importe la manera de vestirnos, ya que desde pequeños nos han inculcado que el hombre no debe llorar, no le debe gustar los colores pasteles, jugar solo con carros o pistolas, mientrás que a la mujer, vestirla solamente con vestidos, color rosa, muñecas, si se juntaban con niños o hacian cosas al igual de que los niños eran llamadas: Marimacho, marica, etc.
Mi gran pregunta es ¿EN QUÉ SOCIEDAD NOS ESTAMOS CONVIRTIENDO?, ¿SEGUIMOS CON LA MENTE CONSEVADORA?, ¿CÓMO NOS CONSIDERÁN LAS FUTURAS GENERACIONES?, acaso no nos hemos puesto a pensar que estamos inculcando a nuestros hijos, tal vez la violencia se de dentro de nuestro hogares y nos quedemos callados por miedo, vamos a seguir vulnerando nuestros derechos, hablemos, ya no permitamos que estos casos de violencia se den, acabemos con lo que tanto odiamos decir "YO ME LO BUSQUE".
Es la educación patriarcal la que nos encierra a hombres y a mujeres en "deberes ser" de formas definidas y estructuradas que, a lo largo de las generaciones, se siguen reproduciendo y concluyen en mal trato/violencia, hacia unx mismx y a lxs demás.
ResponderEliminarEl ubicar estos mandatos de género, desconstruirlos y modificarlos nos permitirá relacionarnos y ser libres de estos cautiverios aprendidos desde el nacimiento. Un acompañamiento terapéutico, en pareja o individual, es un espacio donde se pueden revisar estos aspectos de sí mismx y así poder transformar.
En contra de la violencia de género y de cualkier otra , deseo la paz global .. para personas , animales , todo ! Paz universal , plis ! Saludos .. .. . .
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